Para mediados de este año -el mes de las elecciones-, el gobierno federal confía en que se habrán recuperado todos los empleos formales perdidos el año pasado.
Eso fue lo que aseguró ayer el Presidente Andrés Manuel López, cuando dijo que de acuerdo con cifras del IMSS, de marzo a julio del año pasado un millón 117 mil 584 personas perdieron su empleo, principalmente por los efectos negativos de la pandemia. Para finales de 2020 de quedaron sin trabajo poco más de 647 mil, según las cifras oficiales.
La semi paralización de actividades productivas en todo el país ocasionó un fuerte impacto en el empleo formal, que cayó de manera brutal y no se ha recuperado.
El Presidente aseguró que a la fecha, se habían restablecido unas 600 mil plazas laborales y faltaban cerca de medio millón más, que se van a tener nuevamente al finalizar el primer semestre de 2021.
Creo que no es tan fácil, primero, porque la cifra de desempleo en realidad es todavía alta y porque es muy complicado que de aquí a junio se normalicen las actividades productivas.
Muchos de quienes se quedaron sin trabajo, jefes de familia, obreros, profesionistas, lo mismo hombres que mujeres se quedaron sin posibilidades de reinsertarse en el mercado laboral y con problemas económicos.
El Presidente hizo el compromiso, pero no todo depende de él. Los factores internos y externos que no puede controlar el gobierno van a influir en el resultado final y en lo personal, lo veo difícil.
Pero ojalá que así sea, es deseable y urgente porque se trata de empleos perdidos a causa de la situación sanitaria, pero ya se traía un déficit mucho más grande.
Aunque estamos a menos de un mes del inicio de las campañas federales para la renovación del Congreso, si de aquí a junio se generan los empleos suficientes para recuperar los que se perdieron, será un punto a favor del gobierno y de Morena. Si no, se sumará a los compromisos incumplidos.
Por cierto, para lograr la recuperación tendrían que abrir muchas de las pequeñas y medianas empresas que tuvieron que cerrar porque los asfixiaron los cobros de los servicios de energía eléctrica, los impuestos y los créditos. Y eso, en el contexto actual, parece más complicado.
Hay que recordar que ninguno de los diputados federales de la zona hizo lo necesario durante los meses más difíciles, para proponer que dependencias federales y empresas como la Comisión Federal de Electricidad fueran considerados con las micro, pequeñas y medianas empresas y con los demás usuarios, con la eventual reducción o condonación del pago de impuestos y consumos por uso de energía eléctrica.
Eso hubiera ayudado mucho a aliviar la situación que enfrentaron y que obligaron a una gran cantidad a cerrar sus puertas, provocando desempleo y un estancamiento económico del que vamos a tardar en salir.
EN MORENA NO QUIEREN EXTERNOS
Una considerable cantidad de militantes de Morena en Tampico ha comenzado a presionar para la dirigencia nacional no designe a externos (as) en las candidaturas.
Eso aplica lo mismo si se trata de aspirantes que vienen de partidos satélites como el PES y el PT, que de priístas vergonzantes que llegan buscando cobijo y posiciones en el próximo Cabildo.
Hace 2 años, una escisión en Morena provocó que ese partido quedara en el tercer sitio de preferencias en el puerto. Los pleitos por las candidaturas, sean a la Alcaldía o a las regidurías se pelean en serio.
A ver si no les pasa igual que entonces, cuando los militantes históricos denunciaron haber sido desplazados por los y las arribistas.
