La ruta que están siguiendo los partidos hacia la elección sucesoria de 2022 pasa por varias etapas, algunas de las cuales ya han sido superadas por varios de los aspirantes de los principales institutos políticos. En este camino, varios se han ido quedando atrás, pero todavía falta que otros dejen la carrera. Se van haciendo menos de uno y otro lado.
En Morena, partido al que hasta ahora la mayoría de las encuestas coloca en primer sitio de preferencias, el primero y principal aspirante sigue siendo el senador Américo Villarreal Anaya, aunque en la última semana la designación de Rodolfo González Valderrama como jefe de la Delegación de Programas Federales lo haya colocado en el aparador de la atención pública y de un salto, escaló del cuarto o quinto lugar en el que estaba, a formar parte de los primeros 3, incluyendo a Adrián Oseguera.
La construcción de la percepción entre buena parte de la sociedad, de que Morena tiene amplias posibilidades de ganar la elección de 2022, incluye el trabajo de los equipos de varios aspirantes, entre ellos de manera destacada el de Villarreal, que han contribuido a generar esa idea.
Impulsado, cuidado, apoyado y alentado desde las más altas esferas del poder político en México e inclusive, del partido, Villarreal sigue consolidando su posicionamiento entre los diversos aspirantes. Esta semana, como miembro de la Comisión de Asuntos Fronterizos abordó el tema de la problemática derivada de la migración de centroamericanos y haitianos en Tamaulipas y en México, proponiendo la inclusión de partidas en el Presupuesto 2022 para atenderlos, además de haber sostenido reuniones con representantes de sectores productivos de diversas regiones, como lo acaba de hacer con miembros de organismos privados de la frontera, en lo que parece más la etapa de afianzamiento de una posición aventajada y cuidada desde el centro.
Américo ha ido edificando una imagen de sólida ventaja, aunque la incorporación de elementos como Rodolfo González Valderrama y la integración a la carrera sucesoria de Adrián Oseguera como elemento emergente, han servido para contrastar la fortaleza de los equipos de cada uno de ellos. De los demás, salvo Maki Ortíz, todos siguen haciendo un enorme esfuerzo por ser notados.
En ese contexto, Oseguera sigue empujando con fuerza, buscando ser un protagonista decisivo en la terna que ya forman los punteros. En su favor cuentan la trayectoria de toda la vida en la izquierda, así como su participación política que hace años le dio la ventaja de conocer la problemática ciudadana de Madero y la facilidad para proponer soluciones que hoy ha instrumentado como Presidente Municipal.
Adrián es un elemento que Morena ve muy bien a nivel nacional y con el empuje que ha recibido de varios liderazgos, se coloca en la terna de aspirantes a la nominación y sus posibilidades de obtenerla no pueden minimizarse.
Por su parte, Rodolfo González Valderrama será una figura clave en el funcionamiento del andamiaje político que va a representar para Morena la atracción de apoyos en la base social, integrada principalmente por los beneficiarios de programas federales, las cosas siempre se van decantando poco a poco.
Falta menos, según Mario Delgado, para que Morena conozca el nombre de quien va a ser su candidato a la gubernatura en 2022 y como se ven las cosas a pesar de la ventaja que les dan las encuestas, por las experiencias vividas este año, no parece que el partido se quiera confiar buscando jugársela con quien no tenga un posicionamiento firme entre la sociedad.
Por el lado del PAN, también vemos esfuerzos notables de sus aspirantes para buscar crear una percepción de que no está escrita anticipadamente la derrota en las elecciones, pues inclusive movimientos de último momento amplían la baraja de aspirantes y ayudan a que el partido no se quede sin opciones, si la dirigencia nacional decide que la candidatura sea para una mujer.
La incorporación de Yahleel Abdalá Carmona al gabinete como secretaria de Bienestar Social la pone automáticamente en la lista de aspirantes, porque la posición relevante de la dependencia, la enorme estructura territorial y los programas que cubren la atención de necesidades sociales le otorgan de facto un escaparate que puede ser aprovechado para llevar su imagen más allá de Nuevo Laredo, en donde es bien conocida. Claro, eso no quiere decir que por el simple nombramiento tenga más posibilidades de ser la candidata, por encima de César “Truco” Verástegui, Gerardo Peña o Chucho Nader, pues la condición de paridad de género juega mucho a favor de la exdiputada priísta. No obstante, ya podemos contarla en ese selecto grupo.
Sin embargo, en el caso de “Truco” Verástegui sí ha quedado claro que ha estado haciendo un trabajo intenso que ya le está redituando beneficios como el hecho de ser visto como un actor que tiene la capacidad de establecer diálogos, propiciar consensos y llegar a acuerdos con distintas fuerzas políticas. La percepción de que no sólo tiene los hilos de la operación política, sino de que tiene la habilidad para darle resultados al equipo de gobierno en el que juega, es quizá una de las más fuertes ventajas que tiene en la carrera azul.
“Truco” lo mismo va como representante del gobernador a tomas de posesión de Alcaldes y Alcaldesas de Morena o del PAN, que se reúne con grupos de la sociedad civil, o hasta recibe adhesiones de asociaciones identificadas con Morena y así, calladamente va construyendo una percepción de figura que puede dar la sorpresa en la contienda interna.
En tanto, Chucho Nader sigue haciendo lo de siempre: Trabajar duro y dando los resultados que hoy tienen a Tampico como un ejemplo nacional transparencia y eficiencia en la prestación de servicios públicos; como el destino turístico con mejor percepción de seguridad y con una imagen como sitio idóneo para recibir inversiones productivas que generen más desarrollo.
La relación de Chucho con el empresariado es muestra de cómo se puede ser un eficaz administrador y un excelente aliado del sector privado. También, prueba que aunque haya lineamientos que no le permitan moverse más allá de Tampico, lo que trae le alcanza bastante para pujar por la candidatura panista con enormes posibilidades de obtenerla. El reconocimiento del dirigente nacional Marko Cortés y el aval de su trabajo son de los principales atributos a su favor. Vamos a ver cómo transcurren los siguientes dos meses, que serán cruciales en la toma de la decisión al más alto nivel partidista.
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