La marcha convocada por el Presidente López Obrador para mostrar el apoyo ciudadano a su proyecto, nos dio una prueba de que en Tamaulipas, Morena se mueve como un solo ente, alineado con los principios y tendencias de la Cuatroté en el ámbito nacional.
Así se vio con la presencia de unos 3 mil simpatizantes de Andrés Manuel que por diversos medios, especialmente terrestre, llegaron a la capital del país procedentes de la entidad para participar en la multitudinaria manifestación en apoyo a su líder.
Con el numeroso contingente al que se le facilitó el traslado, quienes manejan las estructuras territoriales en Morena enviaron el mensaje a la dirigencia nacional que a pesar de que no se nota un liderazgo formal en el partido, en Tamaulipas hay quien opere en favor del proyecto presidencial y del local.
Grupos internos como el autodenominado Avanzada Tamaulipeca, que tiene fuerza al interior del partido -quizá más que la propia dirigencia formal-, fue junto con algunos liderazgos regionales los que movieron lo necesario para el traslado de simpatizantes a la marcha del Presidente.
Se dejó constancia de la fuerza cada vez más creciente de ese grupo interno en la dinámica del partido en Tamaulipas y su influencia en decisiones que trascienden lo formal. Eso es incuestionable y de alguna forma se entiende, ante la ausencia de liderazgo mostrada por la presidenta estatal de Morena, Yuriria Iturbe. Los vacíos siempre tienen a llenarse.
En la marcha se vio encabezando el contingente de morenistas tamaulipecos al gobernador Américo Villarreal, a los Alcaldes de Nuevo Laredo, Carmen Lilia Canturosas Villareal, así como a otros personajes de la Cuatroté en la entidad.
Si alguien quiere darse una idea de la importancia que Morena y la Cuatroté en Tamaulipas tiene en el contexto nacional, basta ver cómo respondieron al llamado presidencial para mostrar el músculo en su apoyo.
Ahora, hay que hacer que esa fortaleza se traduzca en unidad interna y en capacidad para mantener el equilibrio de intereses, ahora que hay una indefinición para sacar al candidato a la senaduría vacante.
Ahí se verá realmente hacia dónde se inclina la tendencia del partido y del proyecto estatal en la ruta sucesoria del 24 y también, con qué alianzas va a jugar la Cuatroté local en 2024.
LOS ASPIRANTES QUE YA SE VEN
El evento de aniversario de la Canaco Tampico, realizado el viernes en el Casino Tampiqueño, reunió a buena parte de clase económica y social del puerto en torno a uno de sus representantes más destacados, pero también fue ocasión propicia para que en el mismo recinto estuvieran personajes políticos de quienes hay que estar al pendiente de aquí en adelante.
Entre ellos estaban la regidora Mónica Villarreal Anaya -hermana del gobernador Américo-; Alejandro Rábago Hernández, coordinador de asesores del mandatario; Íñigo Fernández Bárcena, presidente del Consejo de Instituciones Empresariales del Sur de Tamaulipas (CIEST) y José Ángel García Elizondo, ex dirigente nacional de los gasolineros y presidente del Patronato del Museo de la Ciudad.
De los 4, ninguno ha manifestado abiertamente su interés en la Alcaldía y las diputaciones de Tampico pero no hace falta, ya que tienen el perfil adecuado y aunque no son los únicos posibles aspirantes, sí son los que se aparecieron en el lugar.
En la lista hay que incluir también a la diputada Úrsula Salazar Mojica -la sobrina que el Presidente dice no conocer-, a la ex diputada priísta y ahora funcionaria estatal Olga Sosa; al diputado Mon Marón, a la legisladora Rosa González Azcárraga, además de los que se vayan acumulando de aquí en adelante.
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