La contienda interna de Morena por la candidatura a la presidencia municipal de Tampico llegó a un punto en el que cualquiera que sea el resultado, va a indicar el rumbo que tomará la elección.
Por un lado, la diputada Úrsula Patricia Salazar Mojica, presidenta de la Junta de Gobierno del Congreso local ha sido la más consistente en su activismo en algunas colonias de la ciudad, en el tiempo que le queda libre de su quehacer legislativo.
Ella se había mantenido un poco ausente cuando el año pasado la regidora porteña Mónica Zacil Villarreal Anaya -hermana del gobernador- empezó a tener mucha proyección y era vista como la candidata natural para representar a Morena en los comicios de este año.
No obstante, con el paso de los meses Mónica bajo el ritmo y Úrsula empezó a tener mayor proyección gracias a la combinación de una estrategia de posicionamiento, aunque de manera un poco discreta.
Pero en las últimas tres semanas, Villarreal retomó sus actividades en las colonias y en reuniones con sectores representativos.
Inclusive, ya se pueden ver algunos anuncios espectaculares y mantas con su nombre que han sido colocadas lo mismo en domicilios particulares que en cercas de espacios públicos, como algunos parques deportivos del norte de la ciudad.
Aunque Morena no ha definido todavía si las encuestas se aplicarán en viviendas o se harán vía telefónica, se da como un hecho que tanto la diputada Salazar como la regidora Villarreal representan dos corrientes internas del partido que tienen poco en común, porque mientras la primera es hija de una de las fundadoras del partido en Tampico, la segunda es parte del nuevo bloque de militantes que llegó a Morena hace menos tiempo.
Sin embargo, ambas son las propuestas que definirán el rumbo de la elección porque dependiendo de quién sea designada por el partido para contender por la Presidencia Municipal de Tampico veremos la estrategia que se seguirá para tratar de obtener el triunfo ante una fórmula panista que se percibe imbatible.
Este enfrentamiento de aspirantes pondrá a prueba la unidad interna, además de las preferencias de los militantes que podrán contrastar los perfiles, las posibilidades y el trabajo territorial que cada una haya hecho en los últimos años y no solo en los meses recientes, para inclinarse por una u otra opción.
Úrsula o Mónica, quien sea la candidata de Morena a la Alcaldía de Tampico enfrentará un reto enorme, una carrera que será cuesta arriba, independientemente de los recursos, la estructura territorial o lo que los beneficiarios de programas asistenciales federales -becas, pensiones a adultos mayores o a “ninis”– impacten entre la población, porque la percepción que hay en Tampico no es la misma que la del resto del país.
Cualquiera de las dos, también tendrá ante sí el problema de convencer a los simpatizantes de quien no sea favorecida con la designación y además, luchar contra el estigma de si la decisión se basó en criterios personales, políticos o de puro análisis de la competitividad de las dos aspirantes. Parece imposible, pero pueden lograrlo. En cuanto al triunfo, ahí ya sería más difícil.
EL AVAL INCREÍBLE
Quien viva en el vecino estado de San Luis Potosí y padezca a diario el clima de inseguridad, no puede estar de acuerdo con lo expresado el fin de semana por el presidente López Obrador en su visita a esa entidad.
Andrés Manuel llegó al estado gobernado por Morena a través del Partido Verde, en donde el mandatario Ricardo Gallardo Cardona ha sido incapaz de resolver el gravísimo problema de inseguridad que prevalece en esas tierras.
En la capital potosina, López Obrador afirmó que los habitantes de ese estado tienen “un buen gobernador”, ignorando lo que sucede de extremo a extremo de ese territorio.
El Presidente demostró otra vez la incongruencia, la indolencia, la complicidad o el cinismo junto a todo eso.
No se puede explicar racionalmente de otra forma. Gallardo, según es hecho bien conocido, estuvo preso en un penal federal acusado de presuntamente haber cometido delitos de alto impacto.
En ese contexto, es racionalmente inexplicable el aval que Andrés Manuel hizo del mandatario potosino. Y si no creen, que les pregunten a los familiares de víctimas.
ESCOTILLA
En la carrera morenista por las diputaciones, el distrito correspondiente a la zona norte de Tampico registra a varios aspirantes que buscan la nominación, habida cuenta de que es el que ofrece más posibilidades de triunfo en los próximos comicios.
En la lista hay nombres como los de Lucero Deosdady Martínez, quien aparentemente es representante de la Avanzada Tamaulipeca. También está el activo regidor Juan Pizaña Martínez y el Dr. Joaquín Juárez Durán, uno de los fundadores de Morena en Tampico, contemporáneo en la UNAM de López Obrador y uno de los morenistas más conocidos por su quehacer partidista, en el servicio público y en la atención a grupos de la población desprotegidos.
abarloventotam@gmail.com
