Ayer, los diputados federales votaron la iniciativa preferente que el Presidente López envío al Congreso para modificar la industria eléctrica.
Los que saben bien y suficiente de este asunto, insisten en que la propuesta impulsada por el Ejecutivo federal y aprobada por la mayoría legislativa de Morena y sus aliados del PES y PT, va a encarecer la producción de electricidad, convertirá nuevamente a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en un ente monopólico y además, propiciará una mayor contaminación, al desalentar el uso de energías alternativas para privilegiar los combustibles fósiles como insumos básicos para la operación de las centrales de la empresa estatal.
Desde hace días, diversos especialistas, empresarios y organismos privados trataron de hacer entender a los diputados federales que integran la mayoría en el Congreso, de que si actúan tal como lo quiere el Presidente y aprueban la iniciativa de reforma a la Ley de la Industria Eléctrica, estarán condenando a millones de mexicanos a recibir electricidad cara, contaminante y sin garantía de ser suministrada de manera segura, constante.
Y pusieron como principal argumento el que la semana pasada se hayan registrado varios apagones masivos, primero en el norte y después en la mayor parte del país, como un pretexto de la CFE y del gobierno para dar sustento a su propuesta de iniciativa de ley.
Más allá de si esto es cierto, el asunto de fondo es la docilidad con la que los diputados federales que integran la mayoría, han respondido a la instrucción presidencial de votar a favor de la iniciativa, sin hacerle cambios.
Sin discusiones, sin escuchar a expertos, sin tomar en cuenta a los sectores productivos y sobre todo, sin consultar con los ciudadanos a los que representan, los diputados federales, incluyendo los de Tamaulipas, aprobaron la propuesta.
En su defensa, los legisladores de Morena, PES y PT han dicho que las modificaciones legales van a fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad, lo cual va a garantizar tarifas bajas a los usuarios.
Hay más de este asunto, del que hace días habló Porfirio Muñoz Ledo, diputado federal de Morena y ex coordinador de la bancada en la Cámara de Diputados.
Personaje histórico de la izquierda desde que estuvo en el PRI y después como fundador, senador y diputado del PRD, al llegar a Morena Muñoz Ledo ha sido puntual en señalamientos que dejan mal parada a la autollamada 4T en temas como el uso de la Guardia Nacional para frenar a migrantes centroamericanos y hacerle en su momento, el trabajo sucio al gobierno de Trump.
También ha hablado de la sucesión en la dirigencia nacional de Morena, en la cual participó sin éxito y, recientemente, Porfirio advirtió de los riesgos para el país en caso de aprobarse sin cambios la iniciativa presidencial, tal como sucedía en el pasado.
La iniciativa, dijo, expone a México recibir sanciones por la violación de diversos convenios internacionales en materia de cuidado ambiental y combate al cambio climático, que lo mismo están contenidos en disposiciones del T-MEC, como de acuerdos que existen desde hace años a nivel global.
Estos riesgos también fueron exhibidos como inminentes por empresarios y legisladores, al señalar que la iniciativa de ley viola inclusive derechos de los ciudadanos y de las empresas. Yendo más allá, advierten que esto va a generar una serie de demandas de inconstitucionalidad y que inclusive, habría sanciones económicas para el país.
Pero como estaba previsto, nada de esto impidió que la mayoría legislativa que tiene Morena, con sus aliados del PT y el PES pasaran por encima de estos argumentos.
Entre los apagones que exhibieron las fallas e ineficiencia de la CFE para anticiparse a un problema, los diputados y diputadas de Morena, PES y PT decidieron darle la espalda a los ciudadanos y prefirieron atender la instrucción del Presidente.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí