En materia de protección civil, el trabajo preventivo y puntual hace la diferencia entre una tragedia mayor y una contingencia bien atendida.
Puede parecer algo simple y complejo, pero justo por eso adquiere relevancia la reunión encabezada esta semana por el gobernador Américo Villarreal Anaya con los 43 titulares municipales de protección civil.
El encuentro fue para analizar la situación durante la temporada de lluvias y ciclones 2025, que comenzó este mes.
El enfoque en la prevención es una señal clara de que Tamaulipas ha aprendido la lección de los años duros y ahora elige prepararse, en lugar de reaccionar.
La coincidencia con la presencia del huracán “Erick” frente a las costas del Pacífico mexicano le da al encuentro un peso simbólico y práctico.
Mientras en los estados de Guerrero y Oaxaca se mantienen en alerta, en Tamaulipas se afina el sistema estatal de protección civil para enfrentar los riesgos naturales.
En esa narrativa de prevención y responsabilidad, el mensaje del gobernador fue contundente, al recordar que la coordinación salva vidas, la información oportuna educa y la unidad protege a los más vulnerables.
Durante su mensaje, Villarreal hizo referencia al respaldo que su administración ha recibido del Gobierno Federal cuando las condiciones lo han exigido.
Casos como las inundaciones en Reynosa, donde acudieron la presidenta Claudia Sheinbaum, la secretaria de Bienestar Ariadna Montiel y la directora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, ilustran lo que puede lograrse cuando los tres niveles de gobierno actúan en conjunto.
El encuentro de esta semana también sirvió para presentar el pronóstico de ciclones del Océano Atlántico para este año.
En esa reunión estuvieron el secretario general de Gobierno, el titular de Recursos Hidráulicos y el Coordinador Estatal de Protección Civil.
Una de las cosas que se dejaron en claro es que los municipios cuentan con el respaldo de la administración estatal, que actúa con humanismo y visión de futuro.
En el fondo, lo que se discutió en esa mesa fue el derecho de las y los tamaulipecos a vivir seguros ante la amenaza cada vez más frecuente de fenómenos hidrometeorológicos.
Para evitar la improvisación, se acordó preparar con tiempo a los equipos municipales, revisar protocolos, establecer líneas claras de comunicación y fortalecer la capacidad de respuesta.
El encuentro con los responsables de protección civil municipal ayudó a reiterar que se trabajará con previsión, orden y con empatía para que la coordinación sea eficaz.
SE RECUPERA EL SISTEMA LAGUNARIO
La crisis hídrica que afectó a la zona sur del estado el año pasado, planteó un reto que fue abordado por las autoridades estatales con eficacia.
Con acciones preventivas para evitar fugas de agua del sistema lagunario y obras de remediación de fallas, se ha avanzado notablemente en los últimos meses.
Adicionalmente, las lluvias que recientemente han caído sobre el sur de Tamaulipas han sido bienvenidas, necesarias, oportunas y productivas.
Los datos más recientes del sistema lagunario Guayalejo-Tamesí muestran que en menos de dos semanas se ha presentado una recuperación significativa.
Esto marca una buena noticia por lo que representa, tras varios meses de incertidumbre por la sequía que se tenía en la zona.
La información señala que el 4 al 18 de junio, el nivel del sistema pasó de 0.71 a 0.85 centímetros.
Este aumento puede parecer modesto a simple vista, pero representa un respiro real para el sur del estado, donde esta reserva es fuente principal de abastecimiento para miles de familias.
La Comapa Sur, que encabeza Francisco González Casanova, tiene el registro de que durante el pico de la crisis hídrica en 2024, los niveles llegaron a un histórico y alarmante bajo nivel. Fue un gran reto que finalmente se superó.
A las lluvias de los últimos días se han sumado decisiones técnicas que han hecho la diferencia, como el reforzamiento de los diques en puntos estratégicos del sistema lagunario llevado a cabo por Comapa Sur, lo cual ha evitado fugas y pérdidas innecesarias del vital líquido.
Esta acción, que forma parte de una estrategia integral promovida por el Gobierno del Estado, ha probado ser eficaz, y hoy los resultados son palpables.
También ha influido de manera determinante el escurrimiento natural de la cuenca del río Guayalejo, que ha complementado los trabajos en campo y contribuido al incremento en los niveles de la laguna del Chairel.
Si las condiciones se mantienen, es posible que pronto haya una recuperación más robusta del sistema lagunario.
En este sentido es importante la labor que realiza la Secretaría de Recursos Hidráulicos para el Desarrollo Social, que ha asumido su responsabilidad en la gestión del recurso hídrico.
Las medidas preventivas y correctivas implementadas en los últimos meses han fortalecido la capacidad operativa de Comapa Sur y permitido que las lluvias se traduzcan en agua disponible y almacenada para los hogares, la industria y el desarrollo regional.
