Hace unas semanas comentaba en este espacio que hay partidos que han hecho cuentas alegres sobre las expectativas que tienen de las elecciones de junio.

Esa actitud se ha trasladado a no pocos candidatos que también han hecho escenarios hipotéticos, a partir de números que les han entregado diversas mediciones propias o externas.

Este año, la elección concurrente hará que los ciudadanos vayan a las urnas para votar por 15 gubernaturas, 300 diputados de mayoría, numerosos Congresos locales y Presidencias Municipales.

Tamaulipas es un de esas entidades en donde, además, las condiciones son poco diferentes a las que prevalecen en otros estados, en relación con las preferencias electorales.

Aquí, por ejemplo, Morena aventajaba en varios de los distritos en los que se van a renovar las diputaciones federales. Hace 3 años, el partido oficial se llevó prácticamente todas las posiciones en disputa.

En la elección municipal de meses después y en los comicios para renovar el Congreso, el PAN retuvo la mayoría y prácticamente se llevó todo.

Las cosas iban más o menos bien para Morena, pues la popularidad del presidente López Obrador le venía ayudando a empujar en el mismo sentido las preferencias electorales de manera general, pero aún así no era suficiente para alcanzar o ganarle a los candidatos panistas. Un Gobernador fuerte era el principal factor en contra.

Sin embargo, hace menos de un mes la autollamada 4T dio un giro al juego electoral y en un evidente golpe político, aprovechó diversas denuncias públicas y rumores para solicitar en la Cámara de Diputados el inicio de un procedimiento para desaforar al gobernador Francisco García Cabeza de Vaca.

El cálculo incluyó el efecto mediático de una acusación que fue respondida rápidamente y con un tono firme. El control de daños que se hizo ha resultado bueno en términos generales para García, pero esto es apenas el comienzo de un proceso que se va a llevar varias semanas y mucha discusión en la Cámara, en los medios y en las redes sociales.

Como sea, la denuncia presentada por la fiscalía general de la República (FGR) y su petición de que los diputados validen el desafuero del mandatario tamaulipeco, golpeó la imagen de García y de paso, del PAN.

El golpe mediático y político asestado por la 4T se funda en la confianza de que Morena y sus candidatos, puedan capitalizar esta embestida contra el proyecto azul.

Inclusive, desde círculos afines al partido del presidente se alentó la divulgación de un razonamiento que por sí mismo se cayó, al ser poco sólido.

A 24 horas de haberse dado a conocer la denuncia de la FGR y su solicitud de desafuero en la Cámara, ya desde algunas oficinas de Morena se difundió por diversos medios que esto le provocó al PAN una caída de 12 puntos en las preferencias. Los que realmente saben de esto, refutan esa narrativa asegurando que es prácticamente imposible determinarlo así, tan rápido, a juzgar por el contexto que existe en este tema.

Lo que es un hecho, sostienen otros, es que pasado el efecto inicial de la denuncia las cosas se van asentando. De un lado y otro se hacen análisis, se miden, se hacen encuestas y también se dibujan posibles escenarios.

En todos, a Morena todavía no le alcanza para ganar el Congreso local ni las principales Presidencias Municipales. De hecho, también en los distritos federales hay riesgo de perder la mayoría que tienen todavía.

¿Qué es lo que explica esto? El reacomodo de fuerzas, el desgaste de los partidos en el poder estatal y federal, la respuesta que está dando ya el PAN y lo que va a ser la guerra del contraste entre los logros de unos y otros.

Yerros y aciertos se van a destacar, se van a magnificar tratando de incidir en el ánimo de la gente antes de ir a votar. Los pleitos, abiertos o encubiertos de compañeros de partido también van a ser importantes en la definición.

El pasado de los y las candidatos y candidatas será otro aspecto a tomar en cuenta.

Mientras unos hacen cuentas alegres de la estrategia política contra el PAN y Cabeza de Vaca, otros preparan su propia respuesta en territorio, con datos y evidencias.

SUÁREZ MATA, ¿AL DISTRITO 20?

Algunas señales parecen confirmar que el ex Secretario de Participación Ciudadana de Ciudad Madero, Jesús Suárez Mata puede ser el candidato a diputado local por el distrito 20.

Suárez Mata tiene años trabajando en territorio, lo conoce muy bien y de confirmarse la especie, aportaría a la fórmula que va a encabezar Adrián Oseguera.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí