A diferencia de la coalición de Morena con el Partido Verde y el Partido del Trabajo, en el PAN la competencia puede considerarse abierta al escrutinio público y hasta democrática. Los registros de los interesados son públicos y cualquiera puede conocer a quienes aspiran.
Si bien, a la dirigencia estatal del blanquiazul le sigue pesando la sombra de la sospecha de ser un reducto más de la cofradía cabecista, el órgano de dirección del PAN ha tenido que seguir los protocolos para recibir las solicitudes de registro de las y los aspirantes a las candidaturas a diputaciones locales y presidencias municipales, para el proceso electoral que está en marcha.
La salida de Luis René “Cachorro” Cantú de la presidencia estatal del partido no ha sido suficiente para que el comité estatal se pueda considerar imparcial, pues las carteras que lo integran son ocupadas por personajes plenamente identificados con la cofradía encabezada por Francisco e Ismael García Cabeza de Vaca.
Aún así, las y los interesados en obtener los registros como precandidatos acudieron desde el sábado a las oficinas del partido en Ciudad Victoria, para cumplir con el requisito de entregar documentación y esperar los tiempos definidos para conocer la decisión.
El sábado temprano acudió el diputado local Carlos Fernández Altamirano para su registro como precandidato a la Presidencia Municipal de Ciudad Madero. Esto era un hecho largamente esperado, pues Carlos ha estado trabajando intensamente desde hace más de dos años buscando esa oportunidad.
Como suplente lleva al empresario restaurantero Manuel Flores Mora y con ambos está un equipo de colaboradores que tiene una estrategia clara para aprovechar el posicionamiento que el joven legislador ha logrado en todo este tiempo de trabajo en el territorio municipal.
Otra de las aspirantes que acudió a entregar la documentación es Ibeth Quintá Álvarez, quien antes había buscado ser también candidata, pero por diversos motivos no pudo lograr la nominación, especialmente porque la cuestión de asignación en función de género la había dejado fuera de la competencia.
Ibeth es quizá de las muy pocas panistas que no solamente tienen una trayectoria importante dentro del partido, sino que es genuinamente militante de hace muchos años. No es como quienes han llegado en el último sexenio o trienio a buscar posiciones de oportunidad.
Desde sus primeras participaciones en Acción Juvenil y después en otras posiciones dentro y fuera del partido, así como en el servicio público, pasando por el cargo de consejera estatal, la precandidata a diputada por el distrito 20 de Ciudad Madero es una propuesta que el PAN bien puede aprovechar como alguien con capacidad, conocimiento político y posibilidad de conectar bien con la gente.
Al mediodía del sábado acudió el magistrado del Tribunal Superior de Justicia en la zona sur, Andrés González Galván, quien fue con su suplente Ernesto Samuel Sosa Cavazos.
Andrés emergió con fuerza el año pasado como una propuesta nueva dentro de la oposición y aunque no se le ubicaba con precisión como aspirante panista, decidió presentar su documentación para inscribirse en el proceso interno, confiando en ser el favorecido con la decisión. Andrés ha estado realizando constantes encuentros con vecinos de colonias populares, pero también reuniones con empresarios y liderazgos sociales.
Pero la atención se centró este domingo en la fórmula panista que se registró en bloque, porque los personajes que buscarán la Alcaldía y las diputaciones locales en Tampico combinan experiencia y conocimiento territorial con la confianza del panismo más fuerte del estado.
Desde que llegaron a Ciudad Victoria y al comenzar una caminata que los llevó hasta las oficinas del Comité Directivo Estatal se notó la fuerza del equipo formado por los aspirantes. La diputada federal Rosa María González Azcárraga, el secretario de Servicios Públicos, José Abdo Schekaibán Ongay y la exalcaldesa María Magdalena.
Varios elementos son clave para entender por qué militantes y ciudadanos consideran que esa fórmula registrada era la más esperada: Primero, porque es notoriamente ajena a cualquier influencia de los hermanos Cabeza de Vaca, algo que de entrada es una enorme ventaja. Cualquier indicio de cercanía con ellos o de padrinazgo cabecista les puede costar políticamente muy caro.
En segundo término, la presencia en el lugar del Alcalde Chucho Nader, hoy en día la figura más importante del panismo en Tamaulipas y el único que ha ganado todas las encomiendas que se le han dado, ya sea como candidato o como operador.
El hecho de estar ahí, respaldando la fórmula que encabeza Rosa María es una clarísima señal de en dónde están su confianza plena y el compromiso para que la siguiente administración garantice la continuidad de lo que se ha hecho en Tampico.
Por cierto, como suplente de Rosa González Azcárraga se inscribió Aída Féres de Nader, presidenta del DIF porteño y personaje central en la estrategia de atención a las familias tampiqueñas en los últimos cinco años.
Luego, como aspirantes a las diputaciones locales se registraron José Abdo Schekaibán Ongay, el secretario de Servicios Públicos, quien lleva como compañero a Julio Gámez, un panista muy conocido entre la militancia y operador territorial.
También entregó su documentación la exalcaldesa María Magdalena, quien invitó como suplente a la abogada Nora Izaguirre Acevedo. Norita, como la conocen amigos y familiares, es hija del empresario Oscar Izaguirre Ávila y nieta de doña Noriney de la Garza de Acevedo, quien tiene amplio reconocimiento entre un vasto sector de la sociedad civil y empresarios. Ella es quien le aporta interés a esa dupla.
De la fórmula completa, por supuesto que el interés está en el equipo Rosa González Azcárraga-Aída Féres de Nader, pues como decía antes, resumen en una señal clarísima la apuesta del panismo ajeno a los Cabeza de Vaca, esos que siguen controlando la dirigencia y el consejo estatal del partido.
ESCOTILLA
El sábado, el diputado local Edmundo “Mon” Marón se registró como aspirante a la candidatura del PAN a la Alcaldía de Tampico. Presentó como propuesta de suplente a Daniel Heredia Niño, miembro de una familia panista de larga historia.
A “Mon” se le ha visto muy sonriente en los últimos días, pues ha estado diciendo que está muy fortalecido en dos encuestas.
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