Después del 6 de junio, los perdedores de las elecciones locales y federales se replegaron, esperando recuperarse de la derrota y pensando en el siguiente paso: la sucesión.
En todos los partidos, los resultados dejaron triunfadores y damnificados por el enfrentamiento polarizado entre el PAN y Morena, situación que se acentuó en el caso de quienes desde antes no tenían muchas posibilidades.
El reacomodo del panorama político y la aceleración de la competencia electoral se notó cuando el gobernador dio el banderazo de salida de los aspirantes panistas, lo cual le metió mayor velocidad a la lucha interna en el blanquiazul y obligó a que en Morena empezaran a salir más interesados en la nominación.
En los demás partidos como el PRI, Verde, Movimiento Ciudadano, Partido del Trabajo y PRD la cosas son diferentes, pues están más enfocados en encontrar un modo de seguir conservando el registro y las prerrogativas, los que aún las tienen.
Una competencia de este tipo siempre va a mostrarnos a quienes aprovechan las facilidades, capitalizan sus ventajas y buscan la manera de crecer cada vez más en las preferencias ciudadanas, con la vista puesta en 2022.
Así es como desde poco antes de las elecciones y después de junio, en diferentes bandos han sido evaluados varios aspirantes que aparecen en diversos sitios en la escala de calificación que dan los tamaulipecos, cuando se les pregunta por sus preferencias de cara a la sucesión.
Y aunque hay quienes estaban adelante a principios de este año, el tiempo y sus resultados como figuras políticas los han ido fortaleciendo y ampliando sus condiciones de favoritos, como en Morena, en donde el senador Américo Villarreal no ha soltado la primera posición que le dan varias encuestadoras y mediciones que se han estado haciendo en la capital del país.
En el partido de la autollamada 4T hemos visto, por el contrario, que se han sumado más de media docena de aspirantes que hacen lo suyo, se mueven y buscan hacerse notar para que el partido los tome en cuenta cuando se hagan las primeras encuestas formales que den pie a la preselección de los finalistas en la carrera por la nominación.
Como en toda carrera, hay adelantados y rezagados. Entre ellos, a 3 días de que se inicie formalmente el proceso electoral y aproximadamente a dos meses de que Moena haga su auscultación ciudadana, es innegable que quienes mantienen un ritmo de crecimiento constante son Villarreal; la Alcaldesa expanista Maki Ortiz Domínguez; el director de RTC, Rodolfo González Valderrama y el Alcalde maderense Adrián Oseguera Kernion, mientras que después de ellos vienen Alejandro Rojas Díaz Durán, Felipe Garza Narváez, José Ramón Gómez Leal, Héctor Martín Garza González, Erasmo González Robledo y ahora hasta el Alcalde de Matamoros, Mario López Hernández.
De ellos, los últimos tres son los más rezagados, pues mientras López acaba de anotarse en la competencia, sus otros dos compañeros de partido permanecen estancados desde hace semanas y parece que solo están ahí para engrosar la lista.
En el PAN, algunas mediciones son coincidentes en que la delantera la lleva el Presidente Municipal tampiqueño Chucho Nader, mientras que con ligeros crecimientos van César Verástegui Ostos y Gerardo Peña Flores, quienes a un ritmo menor registran movimiento.
Aquí es difícil halar de un estancamiento, porque los tres muestran cierta dinámica de aumento en el porcentaje de preferencias, aunque la diferencia entre ellos es notable, de acuerdo con algunas encuestas conocidas hasta ahora. Sin embargo, no hay nada escrito y como se estila, quien defina al que será el candidato del blanquiazul a la gubernatura no será la dirigencia estatal, sin quien tiene el poder actualmente.
En el PRI, entre las legítimas aspiraciones de Ramiro Ramos Salinas, la indecisión de Enrique Cárdenas del Avellano, las ganas de Alejandro Guevara Cobos y la tibieza de Edgardo Melhem Salinas, no sabe uno por dónde vayan a caminar los del tricolor en las elecciones de 2022, aunque lo más seguro es que hagan una alianza formal con el PAN, aunque a Melhem eso le cause molestia.
MEJOR IMAGEN URBANA EN ALTAMIRA
Aunque Alma Laura Amparán Cruz tiene previsto rendir su tercer informe de gobierno este viernes, la Alcaldesa de Altamira se ha dado tiempo de acudir a diversos sectores a entregar, supervisar y pedir celeridad en la ejecución de diversas obras públicas que tienen que ver con el cambio de la imagen urbana.
La señora Amparán ha estado preparándose para leer un mensaje y hacer el recuento de los resultados de sus dos gestiones de trabajo al frente del Ayuntamiento, pero atendiendo también la necesidad de estar al pendiente de que las obras se terminen y los servicios públicos no se suspendan ha estado bastante activa.
Esta semana, por ejemplo, doña Alma Laura ha pedido que las principales vías de acceso a Altamira se mantengan en buen estado, limpias y con una imagen agradable, además de que se brinde el mantenimiento a parques, plazas y jardines, porque el embellecimiento de la imagen urbana es parte de la reconstrucción del tejido social.