Cuando recién detuvieron a Joaquín Hernández Galicia “La Quina”, hace ya 34 años, el gobierno de Carlos Salinas de Gortari utilizó una narrativa diseñada especialmente para reforzar la vigilancia en las instalaciones militares y justificar la brutalidad del operativo militar que terminó con el liderazgo sindical.

Entonces se dijo que la presencia de soldados en refinerías y demás centros de producción era para evitar que hubiera paros o sabotajes que pusieran en riesgo el abasto de combustibles y con ello, se paralizaran las actividades productivas del país. Antes de que pudiera suceder algo, el gobierno federal ya culpaba a “La Quina” de un hipotético desabasto.

Pero de lo que pasó esta semana no se puede culpar ya al fallecido ex dirigente sindical, aunque es igualmente perjudicial tolerar las acciones que se registraron en Ciudad Madero, porque sientan un mal precedente. Le platico: Desde el domingo hubo un paro de trabajadores sindicalizados de Pemex en la Terminal de Almacenamiento y Distribución (TAD) de la refinería “Francisco I. Madero”, que generó incertidumbre entre ciudadanos, empresas y autoridades, porque eventualmente se pensó que provocaría un prolongado desabasto de combustibles en la zona.

De acuerdo con información que se difundió profusamente, unos 3 mil obreros y personal sindicalizado pertenecientes a la Sección Uno del Sindicato Nacional de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) que dirige Esdras Romero Vega, se negaron a cumplir con su trabajo de llenado de auto tanques que acudieron desde el fin de semana a las instalaciones oficiales para cargar combustible.

El principal argumento para sustentar su negativa fue que Petróleos Mexicanos (Pemex) no les ha proporcionado uniformes y equipo de seguridad para cumplir con sus labores, tal como lo establecen las cláusulas del Contrato Colectivo de Trabajo. Se entiende, aunque no se justifica la acción.

El asunto se fue resolviendo de manera parcial la tarde del miércoles, cuando gradualmente comenzaron a cargarse de combustible poco más de 100 pipas que permanecían estacionadas en diversos sitios aledaños a la refinería, a la Terminal de Abastecimiento y a la Terminal Marítima. Sobra decir que las pérdidas económicas fueron cuantiosas por el retraso.

Sin embargo, aunque Pemex y el sindicato hicieron mutis y eludieron definir una postura sobre el tema, el problema surgió y puso en evidencia que, como antes, el sindicato petrolero actúa como en los viejos tiempos, esos que los actuales dirigentes nacionales y seccionales tachan como los más oscuros, sin reparar en que los de ahora son casi iguales, aunque la diferencia es el grado de cinismo.

Es absurdo que Pemex y por ende el gobierno federal hayan permitido que por un asunto meramente laboral, por un pendiente en el cumplimiento de compromisos contractuales con algo tan sencillo de cubrir como los uniformes, herramientas y equipo de seguridad que es necesario para que realicen su labor de manera adecuada, se haya permitido un paro que provocó incertidumbre y una percepción de debilidad institucional ante chantajes sindicales.

Como decía antes, de este paro no se puede ya culpar a “La Quina”, tampoco a los conservadores, a los fifís, a los machuchones del pasado, porque simple y llanamente el paro se debe adjudicar como responsabilidad tanto a Pemex como al sindicato: La empresa por no cumplir con sus compromisos laborales y el sindicato por no hacer lo necesario para evitar esto. Lo dicho: No se puede culpar a “La Quina” y tampoco se puede afirmar que los tiempos pasados y que los liderazgos de antes fueron peores que los de ahora.

LA INVERSIÓN EGIPCIA EN TAMAULIPAS

Ayer, el gobernador Américo Villarreal Anaya hizo una visita al sitio en donde el gobierno federal construye la refinería “Dos Bocas”, en el municipio de Paraíso, Tabasco, de donde trajo muy buenas noticias.

El mandatario acudió como invitado de la secretaria de Energía Rocío Nahle García para visitar el proyecto energético más importante del sexenio y la funcionaria aprovechó para confirmarle que ya hay una autorización para que una empresa de capital egipcio construya una planta de fertilizantes en la entidad, algo que traerá además de inversión privada, mayor atractivo para hacer negocios y generar empleos.

Algo más: Para avanzar en la formalización de este proyecto, en unos días más estará en la capital del estado el Embajador de Egipcio en México.

Las buenas nuevas para Tamaulipas se conocieron en el marco de la visita efectuada por el mandatario tamaulipeco a Tabasco, en donde la secretaria de Energía, además de mostrarle los avances reconoció que en ello contribuyen de manera destacada muchos trabajadores especializados originarios de Tamaulipas, en donde existe una mano de obra altamente calificada en este sector.

ESCOTILLA

En 22 días, José Ramón “Jotaerre” Gómez Leal, candidato a la senaduría por Morena-PT, ya había recorrido 38 de los 43 municipios de la entidad, sosteniendo reuniones con simpatizantes y con representantes de la sociedad civil, así como de organismos productivos.

El mensaje que “Jotaerre” Gómez lleva a los lugares a los que acude se centran en una propuesta que contiene varios ejes de trabajo legislativo que son de interés para Tamaulipas, como son migración ordenada, trabajo y previsión social, región fronteriza, seguridad, desarrollo y bienestar social, así como Ciudadanía Participativa e Informada.

Aunque la elección extraordinaria no luce complicada, el abanderado de la coalición Morena-PT quiere realizar la mayor cantidad posible de encuentros con ciudadanos para dialogar con ellos y escuchar sus inquietudes.

abarloventotam@gmail.com

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