En la primera reunión del Subcomité de Enfermedades Emergentes y Reemergentes del Comité Estatal de Seguridad en Salud, se analizaron los temas sobre calidad del agua, monitoreo y su impacto en la salud poblacional, para prevenir posibles brotes que pudieran registrarse en este 2024 ocasionadas por la escasez del agua como las enfermedades diarreicas agudas (EDAS).
Ante el riesgo que representa la escasez de agua que se registra en la mayor parte del país y especialmente en territorio tamaulipeco, la Secretaría de Salud, por instrucciones del gobernador Américo Villarreal Anaya, coordinó los trabajos del subcomité en donde el tema principal se enfocó a implementar acciones para proteger a la población y evitar daños a la salud, por esta causa.
En representación del secretario de Salud, Vicente Joel Hernández Navarro, el subsecretario de Salud Pública, Marggid Antonio Rodríguez Avendaño, presidió esta primera sesión ordinaria, en la que se sometieron a análisis y valoración las enfermedades que pudieran representar riesgos a la salud y brotes en este año como son las diarreas, sarampión, dengue, entre otras.
“El objetivo es analizar de manera permanente el comportamiento de las enfermedades como las diarreicas que pudieran estar ligadas al consumo del agua o la falta de esta, ya que también el no contar con el líquido para desinfectar los alimentos o lavarnos frecuentemente las manos, son factores que ponen en riesgo la salud” dijo.
En esta sesión, se presentó lo correspondiente a la calidad del agua para uso y consumo humano, por parte de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COEPRIS), quienes verifican que los sistemas formales de abastecimiento sean clorados de manera adecuada para evita la presencia de bacterias y cada año se realizan un promedio de 60 mil monitoreos en los más de mil 400 puntos existentes, de los cuales el 98 por ciento, a la fecha, cumple con la eficiencia de cloración.
Por su parte el director general del Organismo de Cuenca Golfo Norte, Jesús Jaime Gudiño Zárate, presentó el análisis y su impacto de la calidad del agua en la salud poblacional, en donde destacó que en el 2023 se registraron las temperaturas más altas en el estado y actualmente son 32 municipios que se encuentran con algún grado de sequía, por ello la importancia de aplicar medidas que impacten en el bienestar de la población para evitar daños a la salud.
Por último, Rodríguez Avendaño destacó que para dar resultados eficaces, se requiere de la coparticipación de todos, población, presidencias municipales y organismos involucrados, para que con este semáforo de sequía, se evite la presencia de brotes de enfermedades, así como el realizar acciones que mejoren el manejo del agua almacenada.
En la reunión que se llevó a cabo en las instalaciones de la Secretaría de Salud, se contó con la presencia del representante del comisionado estatal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios, Alberto Moctezuma Castillo; el director de Epidemiología Estatal, Sergio Eduardo Uriegas Camargo; la directora del Laboratorio Estatal de Salud Pública, Norma Alicia Villarreal Reyes, así como los representantes del IMSS e ISSSTE y de manera virtual, hospitales y jurisdicciones sanitarias de la entidad.