La entrega de la medalla “Fray Andrés de Olmos” al mérito ciudadano a David Gómez Fuentes, fue nuevamente motivo de encuentro entre prominentes miembros de la sociedad civil, la élite empresarial y de familias que han forjado la identidad socioeconómica y política porteña en el último medio siglo.
David Gómez Fuentes, fundador y durante 39 años rector del Instituto de Estudios Superiores de Tamaulipas (IEST), fue objeto del más alto reconocimiento que Tampico entrega a sus ciudadanas y ciudadanos que han contribuido al desarrollo y a enaltecer el nombre de la ciudad en los ámbitos nacional e internacional.
Gómez Fuentes es un hombre respetado, respetable y respetuoso. Educador, amante del basquetbol, tampiqueño comprometido con el desarrollo integral pero sobre todo, una persona sencilla y recta.
En algunas oportunidades he tenido la fortuna de charlar con él, en corto y casualmente, de temas personales y algunas coincidencias. En varias ocasiones lo entrevisté cuando era rector del IEST y siempre fue de trato amable, sencillo, franco.
En 1996, el maestro Gómez Fuentes fue Síndico en el gobierno municipal que encabezó Diego Alonso Hinojosa Aguerrevere. Luego, una vez concluido su encargo en el servicio público continuó al frente del IEST, en donde siempre fue un elemento de todas las confianzas del fallecido Burton E. Grossman, presidente de Grupo Continental y principal impulsor de esa universidad.
El acto de ayer es trascendente y está cargado de señales si lo vemos desde varios ángulos, porque no sólo se trata del reconocimiento a los méritos que tiene como ciudadano David Gómez Fuentes, sino que es una ratificación del sentido de pertenencia y de la visión sobre los destinos de Tampico y de Tamaulipas que tiene un amplio y poderoso grupo social, económico y político regional.
En el gobierno de Chucho Nader, el Cabildo decidió otorgar la presea al mérito ciudadano a los empresarios José Ángel García Hernández, Bertha Salinas Ruiz y ahora, a David Gómez Fuentes.
En los tres casos, la principal línea de coincidencia es su pertenencia al influyente sector privado y a las sólidas relaciones de amistad y de trabajo, además del altruismo y de su participación en los sectores educativo y de salud.
Decía que en la sesión extraordinaria del Cabildo efectuada ayer en la Casa de la Cultura, hubo señales interesantes si se saben entender, políticamente, claro.
Para empezar, la asistencia como invitado especial del gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, quien atendió la invitación que le hizo el Alcalde Chucho Nader. Que yo recuerde, es la primera vez en 5 años que el mandatario se da tiempo para asistir a un evento de este tipo en Tampico.
Una explicación puede ser que Cabeza de Vaca quiera enviar un mensaje al panismo y al influyente empresariado tampiqueño en los meses previos a la selección del candidato panista a la gubernatura, mostrando su disposición a escuchar sus inquietudes y sugerencias.
Finalmente, el panismo porteño es el único que se erigió como ganador en las elecciones de junio y numerosos destacados miembros del blanquiazul son también figuras emblemáticas del sector privado. Luego, pues, esto también es política y en política nada es casualidad.
Un dato adicional para ilustrar esta relación: Horas después de que formalmente se iniciara el embate jurídico y político de la autollamada 4T contra Cabeza hace unos meses, fueron los empresarios de Tampico los primeros en refrendarle su apoyo institucional y eso también cuenta.
Sigo creyendo que ayer García Cabeza de Vaca acudió a compartir el beneplácito por el reconocimiento a David Gómez Fuentes, pero especialmente vino a confirmar que la élite empresarial porteña está unida y fuerte más allá de ideologías políticas, pero coincidiendo en su interés por participar en el mejoramiento de las condiciones de vida de la gente en Tamaulipas, tal como ya sucede en Tampico.
Vamos a ver si de esto hay reacciones en el mediano plazo, entendiendo que cualquier proyecto político que el actual grupo en el poder quiera hacer exitoso debe tener el visto bueno y el respaldo del panismo porteño y de sus empresarios.
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